Es real que la succión siempre es una ayuda para el bebe, mejor aún si usa el chupete para satisfacerla, sobre todo para esos momentos de inquietud donde nada lo calma.

También es cierto que no todos los bebes pueden aprenden a usarlo o les cuesta mas la adaptación sobre todo cuando los papas no están tan seguros de su utilidad (por no saber o por estar mal informados) y no insisten para que el hijo aprenda a sujetarlo en la boca.
Entonces el o los dedos aprovechan y ganan el terreno.
Pero no hay que desanimarse, siempre se puede volver a empezar y convencer al pequeño que es la mejor opción.

Primero repasemos que se puede hacer; ningún bebe sabe sujetar el chupete en la boca, ya que el mecanismo de succión con el que nacen les permite tomar la leche del pecho o de la mamadera pero no sostener un chupete.
Para que la succión sea efectiva y el bebe pueda alimentarse debe ejercer un movimiento de protrución con la lengua y de esta manera poder sacar la leche.

Como se darán cuenta si le colocamos algo en la boca (el chupete) y no la sujetamos, la expulsará para afuera. Acá es donde los papas desorientados dicen "No le gusta, no lo quiere" entre otras cosas y no insisten. Cuando se quieren acordar, el señor dedo ya esta instalado en la boca.
¿Pero porque no expulsa el dedo o la mamadera o el pecho si tiene este mecanismo de protrución? Tan solo porque la mamá o el mismo bebe empujan para adentro (cuando la mamá amamanta se pone al pequeño panza con panza y lo trae contra su pecho). Si le dejáramos la mamadera sola sin sostenerla o el pecho no estuviera en el cuerpo de la mamá o el dedo no fuera parte de su mano sucedería exactamente lo mismo que con el chupete.

¿Entonces que hacer?
Aceptar que el chupete es una ayuda para el bebe y los papas, ya que por medio de la succión el pequeño se relaja y calma sobre todo en eso momentos de inquietud o intranquilidad sin causa aparente.
Desalentar la idea de que los chupetes deforman el paladar o alteran la normal erupción dentaria produciendo una mala oclusión.
Recordar que el uso del chupete solo debe mantenerse hasta los 18 o 20 meses ya que si se usan por más tiempo, sí será el responsable de las alteraciones dentarias.
También la persistencia o el mantenimiento de la succión, por el uso del chupete o la mamadera, pueden alterar, en algunos niños, la correcta fonación o articulación de las palabras y esto se debe a la mala posición que adopta de la lengua para succionar.
Recordar que no debe colocarse ningún aditamento (azucares, dulces o bebidas) al chupete ya que son la causa por la que se producen caries dentales y destrucción del esmalte dentario.
Usar el chupete a partir de las primeras 72 hs. ayudandolo para que el bebe lo pueda sujetar en su boca (ahora que sabemos que lo va a expulsar). Se puede lograr colocándole la mano por delante para que el chupete rebote contra ella o poniendo al bebe en posición como cuando se lo va a acunar, de esta manera el chupete rebotará contra el cuerpo de la mamá, el papá o de quien lo tenga upa. Así se ira adaptando a este nuevo mecanismo de succión que no es igual al que utiliza para alimentarse.
Buscar diferentes chupetes, hasta encontrar el que al bebe le resulte cómodo de sujetar en su boca, que con seguridad no es ni el mas lindo ni el que se aconseja en la televisión, ni el mas sofisticado.

Por último para aquellos bebes que por uno u otro motivo no lo han podido incorporar aún, se deberá seguir intentando, ahora que conocemos los mecanismos por los que puede “rechazarlo”, como si fuera la primera vez.
Cuando se coloque el dedo en la boca se lo reemplazará por un chupete que para estos casos será, tal vez, el que tenga la forma mas alargada, que se asemeja al pezón y no aquellos que tienen una forma “mas anatómica” o con la forma del paladar.